Cultura
Los problemas que trae una medida arbitraria
Javiera Carrillo
Redactora
En marzo de este año, cuatro personas fueron detenidas en Quillota después de que se les hiciera un control de identidad por parte de carabineros. El motivo para realizar ese control fue que funcionarios de la policía sintieron olor a marihuana en el auto en que se encontraban los implicados, quienes, posteriormente, reconocieron que habían consumido. Finalmente, los cuatro fueron condenadas por tráfico ilícito de estupefacientes.
La defensa de los acusados apeló a que el indicio que generó el control de identidad, el olor a cannabis, no era verificable ni objetivo, por lo que se debería invalidar el juicio oral y la sentencia.
Sin embargo, la Corte Suprema desestimó el argumento de la defensa, y concluyó que el olor a marihuana puede ser un indicio suficiente para que Carabineros realice un control de identidad: “no es una simple apreciación o valoración subjetiva del funcionario policial que efectúa el control, por el contrario es un hecho objetivo percibido por uno de los sentidos, a saber, el olfato, en un contexto que permite otorgarle seriedad y objetividad, dado que como se indicó y quedó asentado que el olor se presenta en un recinto cerrado y de menor tamaño, como lo es, el interior de un automóvil”, fue la explicación de la Corte Suprema según señala el Diario Constitucional.
Así, se justificó el actuar policial, pues el olor a marihuana sería un indicio claro “de que los imputados ‘podrían’ estar cometiendo un delito en relación al porte o posesión de sustancias estupefacientes”, lo que haría pertinente el control de identidad y el registro de vestimentas y equipaje del vehículo.
La actual ley de control preventivo de identidad está vigente desde el 2016. Si bien desde 1998 los carabineros están habilitados para realizar controles de identidad a personas sospechosas de haber cometido algún delito, fue el 2016 que se aprobó una ley que amplió estas facultades, permitiendo que cualquier mayor de edad pudiese ser controlado, con o sin sospechas.
Esta ley ha sido criticada por prestarse para una discriminación arbitraria por parte de carabineros. Durante el 2020, solo un 2% de los controles terminó en una detención. Además, pese a ser ilegal, entre enero y septiembre del año pasado, 27 mil adolescentes fueron controlados por la policía.
Más allá de la justificación de la sentencia, este caso abre la posibilidad de que cualquier persona pueda ser registrada por el hecho de que haya olor a marihuana, y pone en cuestión, nuevamente, una ley de control preventivo de identidad que ha sido criticada desde que comenzó a tramitarse en el congreso.
Vuelve a ver el último capítulo de Mañanero, y revive la conversación de este tema entre la Profe Pau e Ignacio Socías.